En los últimos años hemos oído hablar mucho de los vinos biodinámicos. Pero vos, ¿sabés de qué se tratan? Repasamos en este post alguna de las principales características de este tipo de vinos.
Vinos biodinámicos
Podemos encontrar a los vinos biodinámicos dentro de la familia conocida como «vinos ecológicos», pero el proceso de elaboración de esta clase de productos requiere una complejidad mucho mayor. El vino biodinámico no es solo un tipo de vino, sino también una filosofía de vida que se rige de con el principio de Rudolf Steiner, padre de la biodinámica, quién expresa que todo lo que venga de la tierra tiene que regresar a ella luego del proceso de producción, por lo que el proceso de elaboración es realizado con materiales obtenidos de la naturaleza, sin intervención industrial.
La primera bodega en aplicar este tipo de producción fue la bodega de la familia Saahs, en Austria, en el año 1970. Desde entonces, haido ganando cada vez más popularidad entre los productores vitivinícolas.
Si bien marcan una diferencia, cabe también destacar que por lo general este tipo de vinos exige más detalle tanto en su cosecha como en el cuidado de la viña, por lo que el producto final suele ser un poco más caro en el mercado. Estos vinos son certificados por Demeter, que es la organización habilitada para realizar este tipo de certificaciones.
En EEUU Demeter es la organización más importante, pero en Europa encontramos alternativas como Biodyvin, pero a diferencia de Demeter, esta solo certifica el viñedo, no la producción en bodega. Demeter tiene estándares que regula para la elaboración del vino biodinámico. Los más importantes son:
No usar microorganismos modificados genéticamente.
No usar clarificantes no autorizados.
Uso maximizado de técnicas de gravedad para el trabajo en bodega.
Mínima rectificación del resultado de la vendimia.
Uso únicamente de levaduras autóctonas.
Mínimo o nulo uso de sulfuroso.
Todos los vinos que cuentan con esta certificación salen al mercado con esta etiqueta.
En Bodega Garzón encontramos que parte del proceso característicos de vinos dinámicos se realiza, ya que los componente que no son utilizados para la elaboración del vino como la cáscara de la uva, semillas, hojas que llegan del viñedo y racimos, son comprimidos y se vuelcan nuevamente al terruño para utilizar como abono natural.
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