Producir un buen vino es una habilidad, crear un gran vino es un arte. Por esto los grandes enólogos son considerados artistas. El enólogo italiano Alberto Antonini recomienda ir a las raíces para lograr un vino que sea una verdadera expresión de su origen.
Quizás usted es ya un entendido en el mundo vinícola o quizás, estos son sus primeros pasos hacia un mundo complejo, exquisito e inigualable. Si está iniciándose, es importante que tome nota a continuación de los tipos de vino: los tips para reconocerlos (algunos obvios, otros no) para diferenciarlos.
Diferencias por el color y el tipo de uva
Vinos tintos
Los vinos tintos se producen con uvas negras, especialmente en los países del sur. Tienen más cuerpo y son más ricos en taninos que los vinos blancos. El tanino es la sustancia química que añade tanto amargor como astringencia, así como complejidad al sabor. En el Uruguay, la variedad emblemática de vino tinto es el Tannat, una cepa de la que hablaremos en los próximos días con mayor profundidad y que da como resultado un vino intenso con persistencia en boca, frescor y suavidad.
Vinos blancos
Los vinos blancos pueden producirse con uvas blancas o con uvas negras de pulpa blanca, y representan alrededor de la mitad de la producción mundial de vino. Generalmente se beben todavía jóvenes y al paladar son frescos y frutados; suelen ser más ácidos que los tintos y tienen un contenido de alcohol inferior. El Albariño de Bodega Garzón es el ícono de los vinos blancos uruguayos, en el que se destacan notas florales de jazmín, fruta cítrica como pomelo y fruta de carozo tipo durazno blanco. Con una boca fresca, larga, suave y mineral, presenta una acidez bien integrada a su estructura amplia y persistente.
Vinos rosados
Para producir vino rosado se pueden usar tres metodologías diferentes. En la primera, el color rosa se obtiene dejando que hollejos de uva tinta tengan contacto con el mosto, en general por dos o tres días, a diferencia del vino tinto en que se dejan durante toda la fermentación. La segunda es por una técnica llamada “sangrado” (saignée), en la cuál el vino rosado se obtiene como subproducto de la fermentación del vino tinto. Y la tercera (poco frecuente) es por mezcla de vino blanco y tinto, como es el caso del Champagne rosado. El Pinot Noir Rose de Bodega Garzón posee notas de cereza roja, flores y especias que introducen un vino elegante, agradable y refrescante, con boca larga y de buena acidez que acompaña muy bien las comidas.
Diferencias en la crianza
Al igual que la diferencia por el color, la maduración del vino suele venir indicada en las etiquetas de los vinos. Sin embargo es importante conocer el proceso y el resultado que en consecuencia nos vamos a encontrar. Comencemos por el tipo de crianza:
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- Crianza en barrica (Fase oxidativa): es el proceso de oxidación del vino y en esta fase el vino adquiere los taninos. Suele realizarse en barrica de roble, americano o francés. La oxigenación del vino es la que le hace evolucionar y la madera interviene en algunas de sus cualidades como el olor y el sabor.
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- Crianza en botella (Fase Reductora): tras pasar un tiempo en barrica, el vino pasa a botella, donde se reducirá la presencia de oxígeno y la maduración se hace más lenta. Las botellas deben reposar en posición horizontal. En esta fase se potencian las características adquiridas en barrica y se genera el ‘bouquet’.
Como resultado de este trabajo, encontraremos varios tipo de vinos:
Conocidos también como cosecheros. Son vinos del mismo año que la cosecha, y en algunos casos, según la denominación de origen, de segundo año. Son vinos que no pasan por la crianza en barrica, sino que se depositan directamente en botella.
Vinos semi-crianza
Son vinos que pasan entre 3 y 6 meses en barrica antes de ir a botella. Son similares a los vinos jóvenes pero más redondos en boca.
Vinos crianza
La crianza del vino es el tiempo que se le da para madurar. El tiempo recomendable para la maduración de un vino va a depender no solo de la uva, sino de las características del suelo y microclima (terroir), la edad de las viñas, el proceso (tipo de filtro usado) e incluso el tamaño de la botella (el vino en una botella chica madura más rápido que en una botella más grande). Los crianza generalmente, suelen tener un maduración de dos años, de los cuáles 6 meses permanecen en barrica.
Vinos reserva
La reserva es el vino que el fabricante separa una vez terminado el proceso de crianza, antes de mezclarlo. Son aquellas barricas que el fabricante considera de mejor calidad o únicas. Generalmente suelen madurar durante 3 años
Vinos Gran Reserva
Se trata de cosechas excelentes y son la máxima expresión del vino. Deben permanecer al menos 18 meses en barrica y 42 en botella y necesitan unos 5 años de envejecimiento.
¿Qué tipo de vino es su favorito? ¿Cuál es el que suele comprar habitualmente? Lo invitamos a contarnos su opinión en nuestras redes sociales: Facebook o Twitter. ¡Lo esperamos en la próxima entrega!